EL REGALO PERFECTO

Erase una vez, un escultor que odiaba las querras, las muerts y la violencia. Aquel día era su cumpleaños y estaba un poco triste porque nadie le felicitó. Aquel escritor se llamaba Jesús. Jesús tenia un museo de esculturas. Su padre no estaba ahi porque se había ido a un viaje. Nadie le habia mandado ni un mensaje ni le mandaron cartas. No recibió ningun regalo. Un amigo le tocó el timbre y le dijo:
¡Tengo un regalo para ti!
Y se quedó sorprendido. Le acompañó y le regaló una pistola gigante (una escultura) porque sabía que no le gustaban las guerras, las muertes ni la violencia, entonces le puso un nudo en la punta de la pistola. Lo puso en su museo para que lo viera todo el mundo. Fue el regalo perfecto el día de su cumpleaños.